martes, 14 de julio de 2009

Grabados de Picasso

Grabados de Picasso en el Museo de Arte Español Contemporáneo, de Palma




Le repas frugal (La comida frugal) es la gran obra maestra de su primera etapa como grabador. En este aguafuerte, realizado en 1904, Picasso recurre con sorprendente realismo a la temática de la pobreza, la miseria y la desesperanza, tan características de su temprano período azul. En 1913 Vollard adquiere esta plancha, junto con otras que fueron realizadas desde finales de 1904 hasta principios de 1906, durante el llamado período rosa, y las edita bajo el título Les saltimbanques (Los saltimbanquis). El aguafuerte y la punta seca son las técnicas gráficas predominantes de esta primera etapa.

Su primera incursión como grabador en la gran aventura plástica e intelectual que fue el cubismo data de 1909, dos años después de la realización de Les demoiselles d’Avignon (Las señoritas de Aviñón). Fue durante su estancia en Cadaqués, en el verano de 1910, cuando Picasso comenzó a trabajar en los aguafuertes que ilustran Saint Matorel, obras fundamentales en la génesis del cubismo analítico. En su intento por asimilar el espacio y romper con la perspectiva tradicional, recurre a líneas agudas y afiladas y construye objetos descompuestos en tantos planos como posibles puntos de vista. En algunos casos incorpora letras a sus composiciones cubistas, como en Nature morte, bouteille (Naturaleza muerta con botella) de 1912, y en otros recurre al papier collé o fragmentos de periódico, como en L’homme au chien (Hombre con perro) de 1914, en su interés por vincular el arte con la realidad.


SUITE VOLLARD



La espléndida colección de grabados de Picasso conocida como Suite Vollard es una de las series más importantes de toda la historia del arte, sólo comparable en calidad y extensión a las realizadas anteriormente por Rembrandt y Goya, y toma su nombre del marchante Ambroise Vollard para quien grabó Picasso estos cobres. Esta serie, realizada entre septiembre y junio de 1936, consta de cien grabados ejecutados con diversas técnicas como buril, punta seca, aguafuerte y aguatinta al azúcar, que son utilizadas de manera novedosa y sorprendente al aplicar Picasso los ácidos con pincel para conseguir asombrosas veladuras o utilizar la simple línea pura, dotando así a las estampas de un naturalismo sensual. Con estas conquistas expresivas Picasso demuestra ser el maestro de las técnicas calcográficas.



En el conjunto de la Suite Vollard se pueden apreciar claramente cuatro temas: El taller del escultor, El minotauro, Rembrandt y La batalla del amor, más tres retratos de Ambroise Vollard realizados en 1937. Algunos de los temas tienen su origen remoto en un relato breve de Honoré de Balzac, titulado Le Chef-d´oeuvre inconnu (La obra maestra desconocida, 1831), cuya lectura impresionó profundamente a Picasso. En él se narra el esfuerzo de un pintor por atrapar la vida misma a través de la belleza femenina y plantea premonitoriamente los orígenes del arte moderno, del que Picasso va a ser uno de los principales forjadores.



Las relaciones entre arte y vida, encarnadas metafóricamente en la relación entre el artista y la modelo, se plantean claramente en el texto de Balzac, pero Picasso, que ha tratado este tema también en cuadros, dibujos y otras series de grabados desde 1914, no se limita aquí a realizar unas meras ilustraciones, sino que sirviéndose de este mito moderno entreteje los acontecimientos de su propia vida con la práctica del arte. Efectivamente, en estas planchas podemos descubrir muchos rasgos de la biografía sentimental de Picasso como su ruptura matrimonial con Olga Koklova, los amores prohibidos con Marie-Thérèse Walter, entonces menor de edad, para quien Picasso se convierte en Pigmalión, y por último su relación conflictiva con Dora Maar. Pero también se pueden apreciar en otros de estos grabados algunos de los temas iconográficos que configurarán el Guernica, tragedia contemporánea que afectó a Picasso muy personalmente y que universalizará en su célebre cuadro.



Pablo Picasso (Málaga, 1881 ­­­- Mougins, 1973) realizó numerosos grabados a lo largo de toda su trayectoria artística, que constituyen, por sí mismos, un capítulo fundamental de su producción plástica. Al igual que en su pintura, y fruto de su intenso proceso creativo, trabajó en series en el desarrollo de su obra gráfica, mostrando su temática preferida y sus procedimientos habituales. Con su constante afán investigador y un dominio absoluto de todas las técnicas, Picasso es considerado un artista universal y uno de los más extraordinarios grabadores de todos los tiempos.

Desde 1899 hasta 1972 Picasso se consagra al grabado y alcanza las cotas más altas de su creación, acorde con su extraordinaria destreza como dibujante, logrando hallazgos tan expresivos y afortunados como en el resto de disciplinas de su producción artística.

La exposición presenta, además de la colección de 100 grabados de la serie denominada Suite Vollard, realizados por el artista malagueño entre 1930 y 1936, un total de 28 grabados fechados entre 1904 y 1915, con estampas de sus etapas azul y rosa (Le repas frugal, 1904, Les saltimbanques, 1905, y grabados de su época cubista, 1909-1015).


Picasso: Grabados. Un recorrido por toda la obra gráfica de Pablo Picasso (Málaga, 1881-Mougins, Francia, 1973).
Museo de Arte Español Contemporáneo. Calle Sant Miquel, 11 (Palma de Mallorca)
Se inaugura el 15 de julio y permanecerá abierta hasta el 18 de noviembre
Horario de visita
De lunes a viernes:
10-18,30 h.
Sábados:
10,30 -14 h.
Domingos y festivos: cerrado

1 comentario:

Nuria R. Artuñedo dijo...

Muy interesante, gracias por compartirlo.